Noé vive en Zaragoza. Le ofrecen un trabajo de 3 días en un restaurante en Escarrilla. La jornada es de 10 horas y el salario 50 € / día. El jefe le dice que ya que tiene que desplazarse él le proporciona alojamiento y comida por 15 € al día. Sacando cuentas de viajes y demás, le sale que va a trabajar por 2,5 € por hora. El jefe se muestra ofendido ante la negativa. Aunque Noé tenía previsto trabajar en cualquier cosa que le saliera piensa que hay unos límites inaceptables.
Pili tiene 2 hijos pequeños y trabaja en un bar. Su contrato es de 20 horas a la semana pero en realidad, ella y otras/os como ella hacen 25 horas. Por cada 4 contratos como ese el jefe se ahorra un trabajador.
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